Quinto Horacio Flaco 

EL PLACER QUE ACOMPAÑA AL TRABAJO...

El placer que acompaña al trabajo pone en olvido a la fatiga.

87.50%

votos positivos

Votos totales: 8

Comparte:

A LIGURINO

¡Oh joven cruel y orgulloso con los favores de Venus! Cuando el vello naciente venga a castigar tu presunción, cuando vuelen de tu cabeza esos cabellos que ahora te caen sobre los hombros, y ese color purpúreo, que aventaja al de las rosas de Libia, desaparezca, Ligurino, bajo una espesa barba, cuantas veces te mires al espejo tan otro del que fuiste, exclamarás: «¡Ah, ¿por qué no pensé de joven como ahora?; ¿por qué con estos pensamientos no vuelve la frescura a mis mejillas?»

85.40%

votos positivos

Votos totales: 137

Comparte:

A LEUCÓNOE

No indagues, Leucónoe (no es lícito saberlo), qué fin reservan los dioses a tu vida y la mía, ni combines los números mágicos. Mejor será que te resignes a los decretos del hado, sea que Júpiter te conceda vivir muchos años, sea éste el último en que ves romperse las olas del Tirreno contra los escollos opuestos a su furor. Sé prudente, bebe buen vino y reduce las largas esperanzas al espacio breve de la existencia. Mientras hablamos, huye la hora envidiada. Aprovecha el día, no confíes en el mañana.

81.03%

votos positivos

Votos totales: 58

Comparte:

DIÁLOGO ENTRE HORACIO Y LIDIA

HORACIO.– Cuando tú me amabas y ningún rival poderoso oprimía tu cuello con sus brazos, me sentía más feliz que el rey de los persas.
LIDIA.– Cuando no ardías más por otra y Lidia no reinaba en tu corazón después de Cloe, la fama de Lidia llegó a ser más ilustre que la de la romana Ilia.
HORACIO.– Ahora me domina Cloe de Tracia, que a su voz dulcísima reúne el arte de pulsar ta cítara, y por ella no temería morir si los hados perdonasen su vida, que me es tan adorable.
LIDIA.– Calais, el hijo de Órnito de Turio, me abrasa en su propia llama, por quien sufriría dos veces la muerte si así lograba que el destino respetase a joven de mí tan querido
HORAClO.– ¿Y si vuelve el amor que antes nos profesábamos y sujeta con férreos lazos nuestros corazones?' ¿Y si doy alolvido a la rubia Cloe y abro mi puerta a Lidia, a quien rechacé?
LIDIA.– Aunque mi amante es más hermoso que un astro y tú más ligero que el corcho y más iracundo que el oleaje del Adriático, seré feliz en tu compañía, y moriré gozosa contigo.

80.36%

votos positivos

Votos totales: 56

Comparte:

A MECENAS

Beberás en pequeños vasos el vino común de la Sabina, que yo mismo guardé en el ánfora griega, cuando recibiste en el teatro, querido caballero Mecenas, los aplausos estruendosos que resonaron en las orillas del patrio Tíber e hicieron repetir tus alabanzas a los ecos del monte Vaticano.
Tú bebes el Cécubo y el licor de la uva prensada en Cales; pero el vino Falerno y el de los collados de Formio nunca corrigen la aspereza del que llena mis copas.

75.61%

votos positivos

Votos totales: 41

Comparte:

EN EL AMOR HAY DOS MALES...

En el amor hay dos males: la guerra y la paz.

75.00%

votos positivos

Votos totales: 4

Comparte:

A LIDIA

Por todos los dioses te lo ruego, dime, Lidia, ¿por qué precipitas con tu amor la ruina de Síbaris? ¿Por qué odia ya el campo de Marte, donde sufrió mil veces las molestias del polvo y el sol? ¿Por qué no cabalga esforzado entre sus compañeros, ni reprime la fogosidad del bridón galo con el freno de dientes de lobo?¿Por qué teme cruzar las rojas ondas del Tíber, y el aceite de los atletas le infunde más horror que el veneno de las víboras? ¿Por qué no muestra en sus brazos las señales lívidas de las armas, ni se gloría de arrojar el disco o el venablo más allá del término señalado?¿Por qué se esconde como el hijo de la marina Tetis, según es fama, antes de la ruina lastimosa de Troya, para no lanzarse, vistiendo la armadura, a la matanza contra las falanges de Licia?

70.97%

votos positivos

Votos totales: 31

Comparte:

LA VIRTUD DE LOS PADRES ES...

La virtud de los padres es una gran dote.

70.97%

votos positivos

Votos totales: 31

Comparte:

A DIANA Y APOLO

Tiernas doncellas, cantad a Diana; mancebos, cantad a Apolo [al Cintio], el de los largos cabellos, y a Latona, tan tiernamente amada por el supremo Jove.
Ensalzad vosotras a la diosa que se recrea en las márgenes de los ríos y las sombras de los bosques, que pueblan las heladas cumbres del Álgido y las obscuras selvas del Erimanto o el Crago cubierto de verdor.
Vosotros, jóvenes, entonad las alabanzas del Tempe y la isla de Delos, patria de Apolo, que adorna sus hombros con la aljaba y la lira presente de su hermano.
Él azotará a los persas y britanos con el hambre cruel, la peste y la guerra, que hace verter tantas lágrimas, apartando sus estragos, movido por nuestras preces, del pueblo romano y su príncipe César [Augusto].

70.73%

votos positivos

Votos totales: 41

Comparte:

EL HUMOR ES UNA LÓGICA SUTIL...

El humor es una lógica sutil.

70.59%

votos positivos

Votos totales: 17

Comparte:

Desde el 1 hasta el 10 de un total de 24 obras de Quinto Horacio Flaco

Añade tus comentarios